
Destaco esta fotografía tomada en Caracas, Venezuela, pero aunque no lo creas, no para hablar de política. Si no que para reflexionar sobre procesos de aprendizaje y estadística.
Si de algo me sirvió hacer el viaje que tanto añoraba a Caracas ahí por marzo del 2019, fue para darme cuenta de que contrario al apocalipsis que nos mostraba la Televisión y redes sociales en esos años, (y que siguen haciendo) si se podía ver a gente paseando, haciendo deportes, riéndose, andando en patines, conversando, caminando, etc. ¡Incluso TOMÁNDOSE UN HELADO!!!!
Este debate siempre da para muchos puntos de vista, peleas, golpes, etc. Los entiendo y algún día quizá nos podremos sentar debatir juntos, sobre lo que es bueno y lo que es malo, pero esta entrada del blog no es para eso.
Últimamente he visto algunos youtubers renunciando de alguna forma a la web de videos, por problemas de stress, ansiedad, sicológicos, y que decantan en un estilo de vida poco saludable, y auto exigente que claramente no los hace feliz. Esto debido a un mínimo de visualizaciones que debe tener el contenido que suben, para que este genere ingresos considerables para poder llevar una vida normal.
Ellos explican que en una fecha exacta (que ahora no recuerdo) las estadísticas de las visualizaciones de sus videos cayeron considerablemente, hablan de un 50% aproximado, lo que claramente también se vio reflejado en la cantidad de dinero que reciben mes a mes por parte de YouTube. Explican que aquel día X el algoritmo de YouTube cambio, haciendo que los usuarios ya no vean sugerencias de los canales que siguen, sino que vean a nuevos canales para seguir haciendo crecer la red.
Me gustaría poner un caso bien específico que es de un youtuber que subía videos relacionados con la divulgación científica. Él hace poco subió un video anunciando su retirada de la plataforma, y explica el como la modificación del algoritmo de YouTube ha llevado su vida a una etapa realmente oscura y difícil de sobrellevar. Invito a reflexionar sobre la importancia que estamos dando a las estadísticas tanto en nuestro día a día como a procesos de desarrollo más largos que preferimos abandonar porque a la hora de exponerlo cibernéticamente, no reciben el feedback esperado, (likes, comentarios, tiempo de visualización, shares, etc.) ¿Cómo llegamos a frustrarnos y abandonar caminos que hasta antes de exponerlos en las redes, era lo que más disfrutábamos de hacer y nos hacía feliz.?
En este caso, este personaje vivía en un 100% de su canal de YouTube, y claramente si tus ingresos económicos bajan, tu vida en general se ve afectada. Pero mi reflexión no se centra en este personaje, sino que la llevo a un contexto más "normal o aterrizado". Niños o adolescentes que hoy en día muchos de ellos sueñan con ser youtubers, y que crean material audiovisual con mucha expectativa y atención en las estadísticas, explorando alternativas para lograr este sueño, y que pueden tener muchas capacidades innatas para alguna disciplina, pero, si ven que sus videos no tienen éxito, o que nadie los ve (que es muy común) se frustraran, y dejaran de desarrollar esa capacidad que quizá si venía en su ADN y podrían haber desarrollado de manera muy exitosa y natural, pero ahí pueden aparecen estos números para cerrar la puerta y decir que no eres bueno.
Entonces, desde mi punto de vista es un gran problema, que como adultos, debemos reconocerlo y lograr que nuestro trabajo se desligue de alguna forma de estas estadísticas para poder seguir desarrollándolo con creatividad y no con ambicion de mass media. Como padres, darnos cuenta de las habilidades de nuestros hijos, potenciarlas, levantarla a la hora de ver frustración y básicamente no dejar que un algoritmo matemático que se modifica solo, más de una vez por día, modifique o altere nuestro desarrollo personal, o el de nuestros hijos, amigos, cercanos.